"Tutti i miei pensier parlan d’amore (Todos mis pensamientos hablan de Amor)". Vita Nuova. Dante Alighieri.

lunes, 8 de junio de 2009

La espiritualidad progresista debe formar parte de un nuevo discurso de la Izquierda.


La victoria del Partido popular en España y el hundimiento del socialismo europeo debería hacernos reflexionar a los que nos sentimos cerca de un proyecto progresista sobre las causas que han llevado a esta situación.


No creo que sea una simple situación coyuntural, indica verdaderamente la necesidad de cambios importantes en el proyecto que el socialismo europeo debe vehicular. Y si no se acierta puede que en algunos paises europeos los partidos socialistas pierdan la función de instrumento de las aspiraciones de renovación y mejora de los pueblos.


Para analizar la situación española parece que se recurre a la idea de la crisis y al castigo que se da al gobierno por la misma. En el caso de Europa, parece que lo que ocurre es que realmente faltan líderes que tengan carisma y avalen proyectos ilusionantes para los ciudadanos, algo que sí ha logrado hacer Obama en EEUU. ¿Esto lo explica todo? Parecen explicaciones excesivamente coyunturales y superficiales.


Desde luego la salida de esta situación no creo que consista en acercarnos a las posturas de la derecha europea, que ahora parece cosechar tantos éxitos. Quizá sea precisamente esta cercanía, en ocasiones, lo que ha podido alejar, a los sectores más avanzados y concienciados de la sociedad, de partidos que aparecen como burocratizados e integrados en el sistema, con un simple barniz progresista.


Creo que lo que se demanda pasa por un cambio cultural y social, algo bastante más profundo que el discutir sobre el modo más o menos estatalista de resolver la crisis. Recuperar valores solidarios, ampliar derechos y libertades, valorar una nueva espiritualidad laica que apoya una opción de laicismo inclusivo y no excluyente, profundizar en medidas ecologistas y feministas, apoyar a tod@s los que desde diversos campos creen que es necesario un nuevo paradigma cultural más solidario y espiritual creo que es el modo de ir sembrando unas nuevas bases sociales que apoyen y se ilusionen con el proyecto progresista.


Parece que un nuevo rostro de la izquierda más espiritual y humanista, sin renunciar al impulso transformador de estructuras sociales y económicas, podría ser la expresión de una demanda de una sociedad que no se conforma con simples cambios técnicos o con eficacia en la gestión, sino que necesita valores nuevos más solidarios y más espirituales.


Me parece que hoy la izquierda y la nueva espiritualidad deberían darse la mano, la izquierda debe ser sinónimo de profundidad, de valores, de espiritualidad, de humanidad, de apertura y flexibilidad, haciendo ver que este programa es más eficaz, porque es más humano y profundo, para resolver los problemas que medidas de dureza y auroritarismo.


Con un programa con el que se puedan identificar grupos sociales plurales pero coincidentes en su crítica a una sociedad sin valores profundos e insolidaria, sólo es cuestión de tiempo el que surja un líder o líderes europeos que se conviertan en símbolos de esos nuevos aires de cambio y renovación, un o unos Obamas europeos. Pero para que esto sea real y no una simple cuestión de marketing es necesario que los nuevos líderes progresistas profundicen en su propia interioridad, sigan caminos de madurez humana y espiritual, de mística y humanismo solidario. Hombres y mujeres espìrituales de verdad frente a los conservadores que utilizan las religiones para lograr ganarse respetabilidad social, reduciéndolas a estructuras de poder y a morales puramente convencionales.


Si seguimos anclados en las viejas fórmulas políticas no creo que haya una alternativa a la derecha, ya que para muchos el propio socialismo será otra cara, en ocasiones más hipócrita por su discurso aparentemente contrario, del sistema que todo lo reduce, lo superficializa, lo utiliza.


Hoy la renovación d ela izquierda pasa también por el trabajo interior, por abrirse a una espiritualidad progresista, heredera de la mejor espiritualidad europea, la raíz de los impulsos útópicos e idealistas de las sociedades.

2 comentarios:

  1. ¡Dios te oiga, José Antonio!

    Tú análisis es acertado, pero tal vez incompleto. Visto desde el lado progresista, socialista, has hecho una análisis perfecto. Falta el análisis social, ¿por qué la sociedad se acomoda más al modelo de la derecha o de la derechas extrema? En principio creo que la sociedad se ha vuelto cómoda, egoísta. Salvo excepciones, sólo mira o miramos hacia nosotros sin preocuparnos de quién tenemos al lado y en qué condiciones vive. Estamos tan pagados de nosotros y nosotras que no nos damos cuenta que cada día se retrocede en derechos y, si nos damos cuenta, parece no importarnos.

    Esta crisis que está asolando a todo el mundo, no sólo a los países ricos, está haciendo salir la peor imagen del ser humanos: la insolidaridad, el fanatismo, las desigualdades, la xenofobia, el racismo, etc.; todo ello muy bien barnizado por los gobiernos que, o desconocen la Historia o no quieren recordarla. Una crisis como la que estamos sufriendo logró que un partido aborrecido por los alemanes se alzase con el poder en ese país. Los culpables de la crisis: los judíos que con su usura robaban al pueblo alemán.

    Hoy, los culpables de la crisis son los inmigrantes, los "moros", los negros. Aquéllos que hace nada hicieron que Europa acrecentase su renta, hoy son demonizados y, ni la derecha -atrapada en su seno por militantes de extrema derecha-, poco democrática, ni la izquierda, que está a verlas venir colaboran para erradicar de la sociedad esta insolidaridad; esta falta de sensibilidad hacia los demás, porque estamos metidos en una "competición" en la que parece irnos la vida; cuando la vida, la vida física se nos irá si estos postulados que están enraizando en la sociedad logran sus objetivos.

    Desgraciadamente, cada día están más cerca de lograrlo.

    Un abrazo

    Sofi

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  2. La derecha también debería tener un discurso más avanzado -no me atrevo a llamarlo progresista no vaya a ser que se asusten-. Compartyo también el comentario anterior. De todas formas creo en cuanto a las elecciones hay algunos aspectos que no se han hecho bien y que estamos a tiempo de corregir independientemente del resultado electoral. Por si te interesa te dejo el enlace al post de mi blog en el que hago una reflexión sobre dos aspectos que me parecen a destacar.

    http://ulises3000.blogspot.com/2009/06/reflexion-post-electotal-presencia-y.html

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Hola, Bienvenid@s.


Este Blog quiere ser un lugar de encuentro para todos aquellos que queremos ayudar a transformar la sociedad para convertirla en un lugar más fraterno, más libre, más justo y, a la vez, somos conscientes de que todo cambio social sólo es posible si hay un cambio personal e interno y no se olvida lo que nos enseña la Tradición Espiritual de la Humanidad, intentándo actualizarla creativamente en cada época.


Mi camino...

el camino que sigo es el camino de la mística del amor, no un amor sentimental, sino un amor inteligente o consciente (amor iluminado decían los antiguos) y solidario, que no olvida el sufrimiento y la injusticia.
Guiado de la mano de de la mística monástica cisterciense (la primera mística moderna del amor), el esoterismo cristiano, la mística de san juan de la cruz y el zen... y animado por ideales progresistas y solidarios os invito a caminar juntos hacia un mundo y unos hombres y mujeres nuevos.