¿Masonería o masonerías?

Tomado de http://www.logiagenesis.com/iv/content/view/54/44/

Escrito por Agrippa

El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua define (Franc)Masonería como una “ Asociación secreta de personas que profesan principios de fraternidad mutua, usan emblemas y signos especiales, y se agrupan en entidades llamadas logias.” Da por lo tanto por sentado la existencia de un modo organizativo estructurado que habría de reunir a los adeptos francmasones cualquiera que fueren sus peculiaridades, engarzados a través de las micro estructuras apuntadas y denominadas Logias. Es precisamente esta aparente estructuración la fuente de algunas de las leyendas negras entorno a la Orden. Pero ¿realmente podemos hoy hablar de la Masonería como un todo más o menos homogéneo o, por el contrario, deberíamos hablar de masonerías como sistemas paradigmáticos peculiares e independientes?

Comencemos ciertamente por constatar que la citada “Asociación Masónica” no existe: no hay ni ha habido nunca un dirigente común, ni siquiera colegiado, de la Masonería Universal. Cuando en ocasiones ciertos escritores masónicos (1) refieren a “Superiores Desconocidos” ello debe ser entendido en un marco simbólico, tan propio de la Masonería, y en cualquier caso limitarlo a un Grupo masónico específico y particular. Más aún, no hay ni ha habido nunca un Organismo reconocido por, y que reconociese plenamente a, todos los masones, no ya del orbe, sino de prácticamente ningún país en su conjunto. Incorporemos finalmente, y sin entrar en detalle, la existencia de múltiples Obediencias (estructuras de logias simbólicas), Jurisdicciones (de altos grados) y Ritos para constatar la ausencia de unidad estructural en la Masonería.

Cabría de todo ello concluir presurosamente que es de masonerías de lo que hemos de hablar... pero quizá no fuese correcto tampoco. En Masonería el blanco y el negro se desdibujan en el damero que los contiene y trasciende a la vez, y en este caso debemos buscar tal perspectiva para contestar a la pregunta planteada.

El gran especialista en el mundo árabe y persa, H. Corbin, también masón, nos da una pista para avanzar en esta aparente contradicción al diferenciar entre la Idea y la Estructura (2) .Toda corriente espiritual, apunta en referencia a la espiritualidad islámica pero también aplicable a la Masonería, consiste en una Idea que se solidifica en una Estructura, siendo así que ésta última en ocasiones pasa a superponerse e incluso anular a la primera, de forma que evoluciones independientes de diferentes cuadraturas pueden ser vistas en el mejor de los casos como lejanamente emparentadas e incluso enfrentadas al transcurrir un tiempo.

La Francmasonería tal como hoy la conocemos nace en los siglos XVI-XVIII en diferentes puntos del continente Europeo (3) donde, partiendo de diferentes fuentes que no habían renunciado a un pensamiento Tradicional que conjugase el Logos junto con el Mythos, va cuajando algo externamente reconocible como coherente y, hasta cierto punto, unitario (4) .

Es así que a comienzos del XVIII eminentes figuras de la sociedad de la época pueden recorrer Europa, desde Edimburgo a Praga, desde Estocolmo a Lyon, entrando en contacto con grupos detentadotes de desarrollos específicos de la Idea común, reconociéndose siquiera parcialmente como miembros de una misma Fraternidad. Todo ello dentro de una heterogeneidad que en este mundo Global se nos antoja peculiar, y que en una época en la que cruzar Europa suponía casi dos meses de viaje no era más que lo único que cabía esperar.

Sumemos a ello las grandes convulsiones y enfrentamientos que, tras las Guerras de Religión, supuso en las postrimerías del siglo XVIII la Revolución Francesa, seguida de todos sus corolarios, las Revoluciones “románticas” del XIX, el progresivo avance del estrecho positivismo como nota característica del XIX y XX,... ¡ Hubiese sido realmente milagroso que una Institución hecha por y para los hombres hubiese resistido monolítica incluso si alguna vez lo hubiese sido!.

Así la Francmasonería se presenta a finales del siglo XIX como una unidad en la Idea pero plural en las estructuras, las cuales, como actualizaciones de ésta, enfatizan tal o cual aspecto de forma que en ocasiones pueden parecer divergir. Nacen de esta forma los diferentes esquemas rituales, algunos de ellos efímeros, así como una pléyada de asociaciones (Obediencias, Jurisdicciones, Regímenes, ...) Todas ellas, no obstante, deben o al menos deberían, esforzarse en seguir fieles a esa Idea, que podemos llamar Tradición aunque sin confundir las palabras con las ideas, y que es aquella que más allá de lo disperso reúne lo que está en el tuétano de la esencia masónica: una metodología basada en el Simbolísmo como vertebrador de un espacio separado (sagrado) en el cual explorar en Sociedad (Fraternidad) los aspectos más internos de la / nuestra realidad, aquellos que nos religan (religiosidad) a un Orden Universal.

En un país como el nuestro, tras años de exterminio sistemático de la Idea Masónica y, peor aún si cabe, cerrado todavía a formas de espiritualidad laica, es relativamente difícil entrar contacto con la Masonería e incluso hacerse una idea aproximada de lo que ella representa (6) , pero es precisamente por ello esencial que aquel que se acerque a las puertas de nuestros Templos movido por su corazón sepa elegir, y tal vez sea una de las más difíciles, a cual de ellos llamar.

A tal propósito, sin ánimo sistematizador y pidiendo disculpas por tan burda generalización, pero si buscando una visión general para el lector profano, podemos señalar actualmente las siguientes tendencias en Masonería, todas ellas presentes en nuestro país:

• Masonería de Escuela Anglosajona. Mayoritaria a escala mundial y liderada por la United Grand Loge of England . De orientación teísta en lo espiritual, estrictamente masculina en el género y socialmente conservadora. Los Ritos mayoritarios son el de York (simbólico y altos grados) y Emulation (y grados colaterales y aliados).

• Masonería de Escuela Liberal. De articulación más plural se define “adogmática” admitiendo en algunas fórmulas incluso a ateos, y aceptando eventualmente Logias integradas por hombres y mujeres. Socialmente más progresista encuentra en el Grand Orient de France su miembro más destacado. Su Rito más significativo, que no único, es el Francés.

• Masonería de Escuela Tradicional. Representa una vía más minoritaria y basada en una Espiritualidad Laica basada en el Simbolismo ritual. Su eje es el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, masculina, no exige creencia más que en una Trascendencia que cada miembro puede formular en primera persona. Socialmente su grado de implicación institucional es reducido. Su banderín de enganche es la Grand Loge de France , a cuya Obediencia pertenece la Respetable Logia Génesis.

• Masonería de Escuela Cristiana. Centrada en torno a los Ritos Escocés Rectificado y Sueco / Alemán requiere de sus miembros, en general, la pertenencia a Religión Cristiana, estando sus rituales embebidos de este simbolismo, masculina y conservadora. Las principales Obediencias históricas son el Gran Priorato de Helvetia (RER, Suiza) y la Gran Logia de Suecia (R. Sueco, Suecia).

Todas ellas, en mayor o menor medida, se reconocen partícipes de una misma Tradición y eso hace aparecer a la Masonería como una Unidad compuesta de multiplicidades, como esos granos que componen la granada y que constituye también uno de nuestros Símbolos. Y también por eso es fundamental que aquel que se sienta llamado a entrar en nuestra Orden, o incluso que ya se halle en su seno, sea capaz de encontrar aquella estructura y sensibilidad que más se adecuen a su Búsqueda.

Finalmente un aviso a navegantes, la Búsqueda Masónica se basa, entre otros aspectos, en el espíritu crítico, y por lo tanto no caben sectarismos. Aquella “asociación” que alardee de oscurantismo y requiera adhesión inquebrantable nunca podrá reclamarse masónica (6) .

NOTAS:
(1): Véase, entre otros, Leabeater
(2): Templo y Contemplación. H. Corbin
(3): Ya es tiempo de reconocer que la fundación de la Francmasonería en el Londres de1.717 es una exageración sobre un hecho de referencia relevante, pero solo eso,... y ello por más que reste a algunos ciertas bazas políticas.
(4): Véase a este respecto por ejemplo lo apuntado, por su originalidad, sobre las “Uniones Cristianas” por F. Yates en su libro “El Iluminismo Rosacruz”
(5): Por más que a algunos les pueda parecer, o incluso interesar, el lugar de la Masonería en las librerías no es el estante de Historia del Siglo XVIII ...
(6): Por falta de Tradición nuestro país es más propenso a aceptar “Masonerías” que nada tienen de ello, por mucho que algunas incluso se reclamen Iniciados de los más Altos Grados Masónicos