Tomado de http://www.womenpriests.org/sp/default.asp
1. Un solo sacerdocio en Cristo
A través del bautismo las mujeres y los hombres comparten igualmente el nuevo sacerdocio de Cristo.Esto incluye apertura a las Ordenes Sagradas.
2. Con poder de presidir
En la Ultima Cena Jesús dio el mismo poder tanto a los hombres como a las mujeres. Ambos pueden ser ordenados para presidir la Eucaristía
3. Desviaciones culturales
La practica de la Iglesia de no ordenar mujeres para el sacerdocio se basaba en tres tipos de prejuicio en contra de las mujeres(las mujeres eran consideradas inferiores, eran consideradas pecadoras e impuras por ello debía apartárselas del altar). Esto afectó el juicio de los líderes de la Iglesia.
4. Las mujeres han sido diaconisas
Hasta el S. IX la Iglesia consagró sacramentalmente diaconisas. Esto prueba que las mujeres pueden ser ordenadas.
5. La posibilidad de que las mujeres sean ordenadas ha estado presente en la Tradición latente de la iglesia.
A través del bautismo las mujeres y los hombres comparten igualmente el nuevo sacerdocio de Cristo.Esto incluye apertura a las Ordenes Sagradas.
2. Con poder de presidir
En la Ultima Cena Jesús dio el mismo poder tanto a los hombres como a las mujeres. Ambos pueden ser ordenados para presidir la Eucaristía
3. Desviaciones culturales
La practica de la Iglesia de no ordenar mujeres para el sacerdocio se basaba en tres tipos de prejuicio en contra de las mujeres(las mujeres eran consideradas inferiores, eran consideradas pecadoras e impuras por ello debía apartárselas del altar). Esto afectó el juicio de los líderes de la Iglesia.
4. Las mujeres han sido diaconisas
Hasta el S. IX la Iglesia consagró sacramentalmente diaconisas. Esto prueba que las mujeres pueden ser ordenadas.
5. La posibilidad de que las mujeres sean ordenadas ha estado presente en la Tradición latente de la iglesia.
Un ejemplo es la antigua devoción a María como sacerdote. Esto demuestra que, de acuerdo con el sentido de los fieles (sensi fidei), en María la prohibición contra las mujeres se ha superado.
6. La Iglesia amplia acepta las mujeres en el sacerdocio.
Después de estudios muy serios y mucha oración, otras Iglesias Cristianas ahora ordenan mujeres para el sacerdocio. Aunque no todas estas Iglesias sean aceptadas por la Iglesia Católica, este creencia convergente consensuada de los creyentes cristianos, confirma que, ordenar a las mujeres está de acuerdo con el deseo de Cristo.
7. Las mujeres son también, de hecho, llamadas a ser sacerdotes.
El hecho de que muchas mujeres católicas responsables, sientan que están llamadas por vocación al sacerdocio es un signo del Espíritu Santo que no debemos ignorar.
Conclusión: No hay argumentos validos contra el sacerdocio de las mujeres, y muchos argumentos verdaderamente Católicos en su favor.
6. La Iglesia amplia acepta las mujeres en el sacerdocio.
Después de estudios muy serios y mucha oración, otras Iglesias Cristianas ahora ordenan mujeres para el sacerdocio. Aunque no todas estas Iglesias sean aceptadas por la Iglesia Católica, este creencia convergente consensuada de los creyentes cristianos, confirma que, ordenar a las mujeres está de acuerdo con el deseo de Cristo.
7. Las mujeres son también, de hecho, llamadas a ser sacerdotes.
El hecho de que muchas mujeres católicas responsables, sientan que están llamadas por vocación al sacerdocio es un signo del Espíritu Santo que no debemos ignorar.
Conclusión: No hay argumentos validos contra el sacerdocio de las mujeres, y muchos argumentos verdaderamente Católicos en su favor.
La fisiología y la psicología femeninas se hallan diseñadas por la naturaleza para culminar en la maternidad, aunque haya quienes no la alcancen por motivos diversos. Igualmente puede decirse que el hombre es el resultado de un diseño que culmina en la paternidad, aunque muchos no la alcancen.
ResponderEliminarLo importante, pues, sería analizar las características propias de maternidad y paternidad en su proyección social. Ambas versiones del ser humano son complementarias, con sensibilidades diferentes, pero confluyentes en interés de la especie. Sublimando la animalidad mediante una educación adecuada es posible que algunos hombres y mujeres (no todos, ni mucho menos) transformen las formas primitivas de amar "lo suyo" convirtiéndolas en amor y sacrificio vertido indiscriminadamente hacia cualquier miembro de la especie humana e incluso lleguen a extenderlo a todas las formas de vida. El sacerdo cio místico es necesariamente andrógino en su culminación.
Pero me temo que este no sea el punto de vista de las religiones monoteistas (exclusivamente paterno-territorialistas). Tienen que pasar mucho tiempos muchas cosas para que pueda estabilizarse socialmente esa nueva sensibilidad que está solo apuntando.
Masculino...
ResponderEliminarFemenino...
todo tiene cabida.
Con la mujer habría una unión mayor con el macrocósmos y el micrcoósmos.
Una nueva evangelización es necesaria.
Grácias.